L' insicurezza che si vive in Argentina:secuestri ed estorsioni ogni istante,terrorismo ed incertezze:adesso polizia assassina.Cosa ci manca?NON VENITE O SARETE A RISCHIO DI VITA.....
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DECISION DEL MINISTERIO DE SEGURIDAD
Echaron a ciento setenta policías de la Bonaerense
Son oficiales y suboficiales involucrados en distintos procesos. La depuracion se realizó a un mes de la asunción del nuevo ministro.
A un mes de haber asumido, el ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, resolvió depurar a la Policía. Ayer firmó la exoneración de 170 oficiales y suboficiales involucrados en procesos por delitos penales, episodios de corrupción y faltas administrativas.
La exoneración es la sanción más grave para la carrera de un policía. Es la expulsión de la administración pública. Los 170 agentes quedan automáticamente inhabilitados para portar arma reglamentaria y vestir uniforme. Tampoco pueden integrar una agencia de seguridad privada.
Los sancionados estaban en disponibilidad preventiva. Es decir: cobraban la mitad del sueldo y no tenían asignadas funciones. Los grados de sanción que contempla la Ley Orgánica de la Policía son amonestación, arresto, suspensión, cesantía y exoneración.
La Dirección de Sumarios tiene expedientes por pérdida de indumentaria (una gorra) hasta crímenes por gatillo fácil. También actúa la oficina de Prevención de Abuso Funcional que atiende denuncias por corrupción y excesos en el servicio. Todos estos trámites son resueltos por un Tribunal de Etica integrado por abogados que no pertenecen a la fuerza.
Desde 1997, cuando la Policía fue intervenida —después del pase a retiro del comisario Pedro Klocdzyk— más de 2.000 agentes fueron declarados en disponibilidad. La exoneración es una medida extrema que fue adoptada en varias gestiones, entre ellas la del ministro León Arslanián.
El inicio de la mayoría de los expedientes de los exonerados son anteriores a la gestión de Cafiero. Pero igual él tomó la decisión final. Desde el lunes, el gobernador Felipe Solá conocía el alcance de la medida que involucra a la Policía, compuesta por 43.000 efectivos.
Fuentes de la Gobernación admitieron a Clarín que el caso Avellaneda (donde fueron asesinados los piqueteros Darío Santillán y Maximiliano Kosteki por la represión policial) es revisado en profundidad. No se descartan exoneraciones.
En ese caso, están en disponibilidad preventiva el comisario Alfredo Fanchiotti; su chofer, el cabo Alejandro Acosta; el oficial principal Carlos Quevedo y el cabo principal Lorenzo Colman.
El 31 de julio también fueron declarados en disponibilidad el sargento primero Carlos Néstor Leiva y el subinspector Mario de la Fuente. Tienen sumario por abuso grave. Según testigos habrían disparado balas de plomo contra los manifestantes. Están prófugos desde el 29 de junio.
Las cesantías no son prácticas novedosas en Buenos Aires. Aún con Klocdzyk en la jefatura, la provincia dispuso de mecanismos para echar policías. En 1996, la Legislatura sancionó una ley de emergencia que habilitaba al ministerio para pasar a disponibilidad a policías sumariados o sin expediente administrativo.
Entre esos casos se registró el alejamiento de 309 comisarios. Ese episodio provocó la creación de un movimiento policial denominado "Los sin gorra". La Ley de Prescindibilidad duró un año y fue sancionada para depurar a la fuerza en momentos de denuncias por gatillo fácil, corrupción y narcotráfico.
En la lista de anteriores cesantías están tres policías involucrados en el caso Budge, juzgados y condenados por el asesinato de tres jóvenes. También el subcomisario Roberto Calzolaio, investigado por su presunta conexión con una banda de narcos y once policías que habrían participado en el procedimiento ilegal que terminó con la muerte del albañil Andrés Núñez.
Los oficiales y suboficiales con sumarios o declarados en disponibilidad representan el 8 por ciento de los efectivos con traeas de prevención del delito callejero.
