La grande hola de represión en Italia continua. Cada ves más se percibe el aire de un nuevo régimen. En la mañana del 4 de diciembre, sobre una medida de la magistratura de Génova, 23 personas fueran perquiridas en distintas ciudades italianas. También fueran hechas 45 búsquedas.

Las acusaciones son de vandalismo, robo (delitos que pueden llevar a penas de 8 a 15 años y no se las contesta fácilmente), fabricación y posesión de material explosivo, posesión de armas y resistencia y violencia contra los representantes de las fuerzas del orden.

La jueza de las investigaciones preliminares, Ela Daliosi, ordenó la prisión preventiva de 9 de los 23 sospechosos (los otros están en prisión domiciliar, 6 con obligación de permanencia y 4 con obligación de presentarse a las autoridades judiciarios). Las medidas fueran tomadas un año e medio después de lo ocurrido.

Todo se pasa en el día siguiente a la liberación de los activistas arrestados en el ultimo 14 de noviembre. El espectáculo continua. En el mismo día se consideró archivar el proceso del caso Placanica - el policía acusado de matar a Carlo Giuliani. Se dice una vez más de Génova. Las acusaciones contra los nuevos arrestados relacionase a lo que se pasó en Génova durante las protestas en contra el G8 en el año 2001 - hechos que llevaran al trágico asesinato de Carlo Giuliani. La justicia parece igual a todos, pero la legitima defensa no.